¿Por qué me da sueño después de comer? La ciencia detrás de la «marea alcalina»
Si alguna vez has sentido una irresistible somnolencia justo después de una comida copiosa, no te preocupes, no estás solo. Este fenómeno, tan común que tiene un nombre coloquial, la «modorra», tiene una explicación científica fascinante y, lo más importante, es completamente normal. Acompáñanos a descubrir la reacción biológica que te hace querer tomar una siesta después de almorzar.
El trabajo de tu estómago: más allá de la digestión
Cuando ingieres alimentos, tu estómago se pone en marcha para procesarlos. Una de sus tareas principales es secretar ácido clorhídrico. Aunque la mayoría lo asociamos con la digestión, este ácido tiene un rol crucial de protección: eliminar los virus, bacterias y hongos que pueden venir en los alimentos.
Pero aquí viene la parte interesante: tu cuerpo es una máquina perfecta de equilibrio. A medida que tu estómago libera ácido, la sangre que lo irriga recibe a cambio una sustancia opuesta en términos de pH: el bicarbonato de sodio, una sustancia alcalina.
La «marea alcalina»: la causa de tu somnolencia
Este intercambio crea una elevación temporal del nivel de alcalinidad en tu sangre, un fenómeno que el Dr. Bernardo Biella denomina una «marea alcalina». Cuando esta marea llega al cerebro, tiene un efecto directo en tu estado de alerta. Es ese cambio en el pH el que te provoca una sensación de somnolencia, cansancio y, por supuesto, un deseo abrumador de descansar.
¿Es bueno tomar una siesta?
El deseo de dormir después de comer es una señal natural de tu cuerpo. El video sugiere que una siesta corta de entre cinco y diez minutos es suficiente para descansar y permitir que esta «marea alcalina» se estabilice, para luego regresar a tus actividades con energía renovada.
Así que la próxima vez que sientas ganas de tomar una siesta después de almorzar, recuerda que es tu cuerpo trabajando, y un breve descanso es una forma perfecta de honrar ese proceso natural.
